Botafogo inscribió su nombre en la Conmebol Libertadores y extiende el dominio carioca.
sehabladeportes.com - 1 de diciembre
En una final que nuevamente enfrentó a dos equipos brasileños, Botafogo se consagró campeón de la Copa Conmebol Libertadores 2024, dejando al Atlético Mineiro como subcampeón. La fortaleza de los equipos cariocas en esta competencia sigue siendo indiscutible y parece que, con el paso de las temporadas, no muestra signos de debilitarse.
Desde la temporada 2017, con el cambio de calendario y formato, el torneo ha sido ganado en siete ocasiones por equipos brasileños y una vez por un equipo argentino. Desde entonces, las finales han sido protagonizadas exclusivamente por equipos de Brasil y Argentina. Solo Lanús, Boca Juniors y River Plate han sido los únicos no brasileños en disputar la final en este periodo.
El dominio de estas dos naciones también se refleja en las semifinales, donde únicamente Barcelona de Ecuador y Peñarol de Uruguay han logrado colarse entre los cuatro mejores de la competencia. La última final sin representantes brasileños o argentinos fue en 2016, bajo el antiguo calendario, en la que Atlético Nacional de Colombia se impuso sobre Independiente del Valle de Ecuador.
En los últimos años, hemos visto cuatro finales totalmente brasileñas en las últimas cinco ediciones. Palmeiras y Flamengo han levantado el trofeo en dos ocasiones cada uno, mientras que Gremio, Fluminense y ahora Botafogo lo han ganado una vez cada uno. El único equipo argentino que logró romper esta racha fue River Plate, en la histórica final contra Boca Juniors, en la que eliminaron a Gremio y Palmeiras en semifinales.
El dominio de los equipos del Brasileirao ha generado cierto malestar entre los representantes de otras ligas y se debe a varias razones. Brasil tiene siete cupos en la competencia y Argentina seis, lo que les da una mayor posibilidad de llegar a las instancias finales. Sin embargo, el factor económico es el que más contribuye a esta disparidad. La liga brasileña se ha convertido en una de las mejores del mundo, atrayendo refuerzos de renombre, lo cual se traduce en el éxito que hemos visto en los últimos años.
La gran interrogante que invade a todos los fanáticos del fútbol sudamericano es qué se debe hacer para detener la supremacía de Brasil. En el otro torneo Conmebol, solo el Athletico Paranaense ha logrado alzarse con el trofeo en dos ocasiones; los demás títulos se han repartido entre otras federaciones.
La supremacía de los equipos cariocas plantea un desafío significativo para el resto del continente. Las diferencias económicas y la cantidad de cupos para Brasil y Argentina son factores determinantes en este dominio. La pregunta que queda es cómo las demás ligas sudamericanas pueden cerrar esta brecha y recuperar algo de protagonismo en la máxima competición continental, como en la Conmebol Sudamericana. Mientras tanto, el fútbol brasileño sigue demostrando su fortaleza y capacidad para dominar el escenario sudamericano.
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