River se impuso por 2-0 ante Deportivo Táchira con goles fuera de contexto y obtuvo una victoria importante en su comienzo en el certamen internacional.
sehabladeportes.com - 3 de abril.
Los dirigidos por Martín Demichelis tenían una deuda: ganar en la Copa de visitantes y así lo hicieron. Dieron la cara en Venezuela, ganaron su primer partido y volvieron a la victoria fuera del Monumental luego de casi dos años.
El Millonario comenzó manejando el encuentro durante más de 15 minutos. Mucha posesión del balón, juego colectivo y varias llegadas al área rival pero ninguna de gran peligro para el local. Incluso, el arquero Araque no tuvo intervenciones.
El conjunto venezolano también impuso su idea de juego y no se achicó ante el equipo argentino. Se paró de igual a igual, aunque la jerarquía entre clubes se notó de todas formas. Teniendo llegadas al área, jugando más directo y aprovechando los espacios y el flojo retroceso de los dirigidos por Demichelis. Durante los últimos 20 minutos del primer tiempo River perdió fluidez en su juego y tuvo que contraerse atrás para evitar el gol de ventaja de Deportivo Táchira, que finalizó cerca de arco del Millonario. Pero al igual que los visitantes, el último campeón de la liga venezolana no le causó problemas a Franco Armani y ninguno logró convertir el gol de la ventaja.
La segunda parte fue una continuidad de la primera para el conjunto argentino. Bajó el nivel y tuvo menos chances de gol, a pesar de ser dueño del balón. No lograba fluidez en su juego con Solari y Colidio pegados a los laterales, totalmente apagados y desconectados del equipo.
Hasta que finalmente, Martín Demichelis comenzó a mover el banco de los suplentes y llamó al joven que todos pedían como titular: Claudio Echeverri. Ingresó en lugar de Nacho Fernández que no tuvo su mejor partido. El Diablito cambió la cara del Millonario. Tan solo a tres minutos de haber ingresado juntó a varios jugadores e intentó un remate que dejó a Miguel Borja mano a mano para definir, pero finalmente chocó con una buena intervención de Alejandro Araque.
Finalmente, en el minuto 72, tras una asistencia de Borja, el uruguayo Sebastián Boselli convirtió para River de carambola. Tras un intento de despeje del defensor de Deportivo Táchira, el Millonario pasaba a ganar el encuentro por 1-0.
A partir del gol, los dirigidos por Demichelis comenzaron a acercarse cada vez más al arco rival. Con un Echeverri suelto, el Millonario tenía más espacio de tres cuartos de cancha para adelante que le permitía manejar el partido. Sorpresivamente, al minuto 79, Fonseca agarró el balón, decidió pegarle desde algunos metros más adelante de la mitad de la cancha y clavó el segundo gol para River.
River, luego de transitar un partido complicado en Venezuela con goles fuera de contexto, pasó a ganar 2-0. Minutos más tarde, tuvo la posibilidad de marcar el tercero en pies del ingresado Santiago Simón, quien increíblemente malogró la situación.
El partido parecía finalizado, cuando el equipo venezolano descontó a los 93’ pero afortunadamente para los de Núñez, el gol fue anulado por fuera de juego de Jefre Vargas y finalmente, el Millonario terminó llevándose una victoria muy importante para sumar puntos, pero también para lo que es la parte anímica de los jugadores. River cumplió y se entona para lo que se le viene en Copa Libertadores.
Por Milagros Gómez.
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