¿Scaloni le podría plantar cara al equipo de De La Fuente?
sehabladeportes.com - 18 de julio
Con la cabeza ya un poco más fría, ¿quién ganaría la Finalissima si se jugara ahora? España y Argentina están en un buen momento, pero son diferentes equipos y sus trayectos hacia el título no fueron iguales. Está claro que no compiten al mismo nivel.
España fue un equipo sólido en la fase de grupos, donde terminó de sorber el último aliento futbolístico de una de las selecciones animadoras de la última década. La Croacia de Modric sufrió una paliza en el primer partido. Contra Italia, que ha sido un fracaso tras otro digno de un análisis aparte, el dominio español fue aún mayor que contra Croacia. Aunque el resultado fue un poco mentiroso, con la victoria por la mínima diferencia gracias al gol en contra de Calafiori.
En el último partido de la fase de grupos, España jugó con suplentes y fue amplio dominador, por lo menos en cuanto al manejo del balón, en el partido ante Albania. La victoria también fue por la mínima, pero demostró que España es un equipo con muchas piezas importantes, no solo los 11 titulares. Así cerró su grupo con puntaje perfecto y sin recibir goles.
Argentina, en la fase de grupos, se enfrentó a equipos en construcción, con los dos equipos de Conmebol estrenando técnicos. En el partido inaugural, se midió a Canadá, dominando las acciones, aunque el equipo norteamericano mostró una evolución interesante. En el segundo partido, Argentina se enfrentó a un viejo conocido, Chile. La falta de efectividad y el buen planteamiento de Gareca pusieron en aprietos a la albiceleste, que dominó el encuentro pero no desplegó su mejor juego. Contra Perú, utilizaron algunos alternantes y mostraron un juego más sólido, probablemente porque ya tenían prácticamente asegurado el primer puesto y la clasificación a cuartos.
En la instancia de eliminación directa se vieron claras diferencias entre España y Argentina. España aplastó a una sorprendente Georgia, claramente inferior. Se midió a una fuerte Alemania, que le compitió de igual a igual, sellando la clasificación ibérica en tiempo extra, y venció con contundencia a la Francia de Mbappe en semifinales.
Argentina, en cuartos de final, se vio muy mal ante Ecuador. Dominó y capitalizó los primeros pasajes del partido con un gol, pero gran parte del encuentro sufrió ante una selección que parecía decepcionar en esta Copa América. Los de Lionel Scaloni se llevaron la clasificación vía penales. En la semifinal, volvieron a enfrentarse a una sorprendente Canadá, que esta vez puso las cosas más difíciles a Messi y compañía, aunque lograron sacar adelante el partido con individualidades.
Tanto la final de la Eurocopa como la de la Copa América fueron muy parejas. España se encontró ante una renacida y complicada Inglaterra, pero la Furia Roja demostró ser el mejor equipo del torneo y se llevó el título en tiempo reglamentario. Por su parte, Argentina no llegaba como el mejor equipo del torneo; Colombia había sido el mejor hasta la final. Aun así, los albicelestes hicieron su mejor partido en toda la copa, demostrando que el estilo y gran juego colectivo que los hizo campeones del mundo seguía presente. Con el gol de Martínez en tiempo suplementario, consiguieron levantar nuevamente la Copa América.
El camino de cada equipo fue diferente, pero en términos de dificultad, el de España fue muchísimo más complicado que el de Argentina. España hoy es un equipo con una extensa lista de jugadores, mientras que Argentina también demostró que puede jugar sin su mega estrella, desplegando un gran fútbol aun si Messi no está en cancha.
España, en el papel, podría sonar como el favorito si la Finalissima se jugara hoy. Tiene una extensa plantilla, jugadores de primer nivel y una idea definida que puede ser letal. Argentina, por su parte, ha mostrado algunas falencias en su juego desde la última doble fecha de eliminatorias, pero también cuenta con excelentes jugadores, una plantilla medianamente extensa y, sobre todo, sabe plantarle cara a las adversidades. Argentina es un equipo que no se amilana ante nadie, y Scaloni podría encontrarle la vuelta a los planteamientos del estratega español, De La Fuente.
A criterio personal, España es favorito, pero Argentina es de cuidado y no sería una sorpresa que lograra vencer a esta poderosa Furia Roja. Al final del día, son los campeones del mundo y, como dijo De Paul, debemos respetar los rangos. ¿Pero, para ustedes, quién se llevaría la Finalissima si se disputara hoy mismo este partido entre el rey de Europa y el campeón del mundo?
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