El equipo de Dallas tiene que vencer a Boston en el cuarto partido de la serie si quiere mantener las esperanzas vivas.
sehabladeportes.com - 14 de junio
Esta noche, la tensión estará en su punto más alto en el American Airlines Center. Los Dallas Mavericks se encuentran en una situación crítica, pues para ellos es ganar o despedirse de sus sueños de campeonato. Enfrente tienen a unos Boston Celtics que han dominado las finales de la NBA, así como la temporada completa, y están a un paso de coronarse campeones por decimoctava vez en su historia.
Los Celtics, bajo la dirección de Jayson Tatum y Jaylen Brown, han mostrado un nivel de juego extraordinario. Tatum ha sido una fuerza imparable en la ofensiva, combinando habilidades de anotación con una visión de juego que ha desarmado a la defensa de los Mavericks. Jaylen Brown, por su parte, ha rozado la perfección, aportando tanto en defensa como en ataque. Pero más allá de las estrellas, el verdadero éxito de Boston ha radicado en su trabajo colectivo. Cada jugador ha cumplido su rol, desde los titulares hasta los suplentes, creando una sinergia que ha resultado en un juego de equipo formidable.
Por otro lado, los Mavericks han tenido que enfrentar varios desafíos a lo largo de la serie. Kyrie Irving y Luka Doncic, dos de los jugadores más talentosos de la liga, han llevado el peso del equipo sobre sus hombros. Sobretodo Doncic que tuvo la responsabilidad en los dos primeros juegos en donde Kyrie no apareció.
Irving, con un buen desempeño en el juego tres parecía que le daba esperanzas a Dallas, junto a Doncic, que precisamente fue señalado como el máximo responsable de la derrota del miércoles. Así que los dos deberán estar en su mejor momento esta noche. No pueden permitirse el lujo de fallar, las debilidades defensivas de Dallas han sido evidentes y solo una ofensiva deslumbrante podría contrarrestar los ataques bien coordinados de Boston.
El entrenador de los Mavericks, Jason Kidd, ha subrayado la importancia de la concentración y la ejecución precisa. Además, destacó que los 11 jugadores seguirán siendo parte de la rotación esta noche, "Todos están listos. Todos deben estar listos para jugar. No hay cambios en la alineación hoy. Pero veremos qué nos depara el mañana", comentó Kidd en una rueda de prensa previa al partido.
La historia de la NBA nunca se ha visto remontadas como la que Dallas necesita para ganar esta serie. Las estadísticas no están a su favor, pero el deporte siempre ha sido un terreno fértil para lo inesperado. Los aficionados de los Mavericks llenarán el estadio con la esperanza de presenciar una de las mayores remontadas en la historia de las finales.
"En la temporada regular hubo momentos en los que perdimos cinco o seis seguidos, y luego logramos 17 victorias y dos derrotas. Sé que aquí el nivel más alto, pero tenemos que tener fe, sé que lo podemos hacer y tenemos que creer hasta el final", dijo Luka Doncic a los medios.
La narrativa de esta serie está cargada de drama. Por un lado, los Celtics buscan sellar su barrida y agregar otro campeonato a su ilustre historia. Por el otro, los Mavericks luchan por mantener viva la esperanza, por mínima que sea, de revertir una situación que parece insalvable. Así que todos estarán pendientes a ver cómo se desarrolla este juego cuatro de las Finales de la NBA.
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